Historia del Mitsubishi Lancer Evolution

La vida del Lancer comenzaría en 1973, un coche que ha estado en producción por Mitsubishi hasta 2017. 

Mitsubishi Lancer Evolution I

El primer EVO se desarrolló en 1992 sobre la quinta generación del Lancer, con el objetivo de reemplazar al Galant VR-4, más grande y pesado, en el Mundial de Rallyes. Se tomó como punto de partida la variante GSR, de corte deportivo, y se le instaló un motor del Galant, un bloque que entregaba 250 CV de potencia. De esta manera se unían los caballos de uno y la ligereza del otro, dando lugar a un combo explosivo. Vieron la luz 2.500 unidades, las necesarias para la homologación del mundial. Con este EVO I comenzaría la historia de un coche que acumularía éxitos y emociones dentro y fuera de las competiciones. El punto principal para poner a prueba el nuevo coche seria el campeonato de Rally WRC, en el cual era utilizado el modelo Galant VR-4 de la casa japonesa.

Mitsubishi Lancer Evolution II

Luego de un año del primer modelo llega a finales de 1993 el Mitsubishi Lancer EVO II, siendo una evolución del modelo base este coche se vendería hasta 1995 logrando un número de 6.582 unidades. En su motor tuvo una ligera mejora que le otorgaría 10 CV de potencia extras, llegando hasta los 260 CV. En su carrocería las grandes mejoras serian su parte frontal enfocada en un aspecto más tuning, y su gran ala trasera diseñada para mejorar la estabilidad en la parte trasera del coche. Era un coche bastante completo que se mejoró un poco más con una serie de detalles que lo harían ir adelante en las competiciones para las cuales fue creado.

Mitsubishi Lancer Evolution III

En febrero del año 1995 llega la tercera versión de este espectacular coche que viene cautivando y ganando seguidores. Los cambios importantes fueron igual que en el anterior, la estética junto a detalles mecánicos. En el motor se reemplazó el turbo compresor por uno de mayor diámetro y capaz de aumentar la potencia a los 270 Cv a 6.250 revoluciones por minuto, algo que haría más atractivo el manejo del coche.

En cuanto a su diseño el coche tomo un aspecto más armónico, logrando un frontal mucho más refinado y con mayor funcionalidad gracias a unas nuevas tomas de aire, al igual que el alerón fue re diseñado con el objetivo de mejorar su funcionalidad. Este coche seria la base de las versiones futuras y lograría aumentar el número de unidades vendidas a 10.431 ejemplares.

Mitsubishi Lancer Evolution IV

Le tenemos un cariño especial porque el EVO V, en 1998, fue el primero de la saga en llegar a España. Se trató de una ligera puesta al día de su predecesor, con cambios exteriores muy sutiles (el alerón era ajustables) pero un habitáculo bastante mejorado. No aumentó su potencia, pero diversas mejoras mecánicas (ECU modificada que aumentó la presión del turbo) auparon el par hasta los 373 Nm. Además, también fue el primero EVO en calzar frenos Brembo, con pinzas de cuatro pistones delante y de dos en el eje trasero.

Mitsubishi Lancer Evolution V

Le tenemos un cariño especial porque el EVO V, en 1998, fue el primero de la saga en llegar a España. Se trató de una ligera puesta al día de su predecesor, con cambios exteriores muy sutiles (el alerón era ajustables) pero un habitáculo bastante mejorado. No aumentó su potencia, pero diversas mejoras mecánicas (ECU modificada que aumentó la presión del turbo) auparon el par hasta los 373 Nm. Además, también fue el primero EVO en calzar frenos Brembo, con pinzas de cuatro pistones delante y de dos en el eje trasero.

Mitsubishi Lancer Evolution VI

Para 1999 llegaría al mercado el Lancer EVO que más impacto causaría en sus seguidores, los cuales creían que no se podía superar al modelo anterior. Con cuatro títulos mundiales en el WRC ya era un coche con una base fuerte y Mitsubishi decidió mejorarlo con una mecánica más avanzada, un turbocompresor de titanio y un intercooler más grande.

Los cambios también se dejaron ver en parte de la suspensión, sustituyendo el material de los brazos por aluminio. La carrocería fue reforzada y su aspecto mejorado gracias a unas llantas de la prestigiosa marca OZ modelo Superturismo Corse. En el 2000 Mitsubishi decidió homenajear a su piloto estrella con una versión increíble denominada Tommi Makinen.

Mitsubishi Lancer Evolution VII

Para el año 2001 aparece una nueva generación con grandes cambios estéticos y en prestaciones. Este nuevo coche era mucho más pesado que los anteriores pero con grandes mejoras mecánicas que compensarían el comportamiento. La potencia de mantuvo en 280 CV pero su par motor aumento a 385 NM, logrando así una mejora considerable. El nuevo diferencial central con tecnología activa se mostraba como uno de los grandes avances mecánicos.

Se presentó como un coche más refinado y llamativo a nivel estético, teniendo un interior de mayor calidad y confort. La carrocería en general aumento su rigidez y los incrementos en el Turbocompresor obligaron a mejorar el intercooler. Una de las versiones especiales del EVO fue una con levas en el volante para cambiar las marchas de la cual solo se fabricaron 2000 unidades.

Mitsubishi Lancer Evolution VII GT-A

También denominado INVECS-II, es el primero EVO con una caja de cambios manual robotizada de cinco marchas con levas al volante. Tuvo que emplear un turbo de menor tamaño, por lo que redujo su potencia a 272 CV. Un punto llamativo era un alerón mucho más pequeño de lo habitual. Apenas se fabricaron 2.000 unidades, todas ellas para el mercado japonés.

Mitsubishi Lancer Evolution VIII

Considerado como una generación más civilizada, esto se debe principalmente a la nueva caja de cambios de seis relaciones, con una sexta larga pensada para rebajar los consumos. Rompe las aristas de su predecesor, sus faros traseros son muy característicos, optimiza la aerodinámica, la entrada de aire del capó mejora un 25% la refrigeración y monta un alerón de fibra de carbono. El motor se revisa pero sigue entregando 280 CV y el diferencial trasero activo llega a su tercera evolución.

Mitsubishi Lancer Evolution VIII MR

Creado en febrero de 2004 para plantar cara al Subaru Impreza Spec-C, la carrocería recibe un tratamiento de carbono que aligera peso y la suspensión estrena una puesta a punto específica.

Mitsubishi Lancer Evolution IX

Puede que su imagen difiera poco, pero el motor cambia algo que se había mantenido durante generaciones: la potencia. El turbocompresor se modifica para llegar a los 290 CV y, además, estrena el sistema electrónico de apertura de válvulas MIVEC.

Mitsubishi Lancer Evolution X

El último EVO y un canto de cisne a la altura de la saga. El cambio de imagen era considerable gracias a la parrilla del frontal y los nuevos grupos ópticos. Contó con un motor 2.90 sobrealimentado cuya potencia variaba entre 280 y 300 CV según el mercado.

Mitsubishi Lancer Evolution X FQ-400

Una variante potenciada del modelo, que llevó el bloque 2.0 Turbo MIVEC hasta los 400 CV, suficiente como para acelerar de 0 a 100 km/h en 3,8 segundos. Pero no solo de los caballos vivía, contaba con un mayor ancho de vías, diferencial central activo, control de estabilidad, tres modos para el sistema de tracción a las cuatro ruedas, llantas ligeras.

Mitsubishi Lancer Evolution X Carbon Series

Como su nombre indica, básicamente se trataba de una edición especial en la que la protagonista era la fibra de carbono. Elementos como la parrilla, las carcasas de los retrovisores, el labio inferior delantero y la entrada de aire del capó estaban hechos de dicho material. Además también se añadían unas llantas BBS específicas y los pilotos traseros oscurecidos.

Mitsubishi Lancer Evolution Final Edition

La despedida del modelo, el canto de cisne. Llegó en forma de una serie limitada a solo 1.600 unidades con muchos detalles exclusivos. A nivel estético el techo de aluminio estaba pintado en negro, tono que repetía en otros tantos elementos, incluidas las llantas Enkei; lucía una placa con el nombre de la edición, el cuadro era específico, las costuras rojas y también indicaba el número de la unidad. Además, su motor elevaba la potencia hasta los 300 CV y montaba frenos Brembo y suspensión Bilstein con amortiguadores Eibach.

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